PRESENTACIÓN: Cremosa, 30 ML

QUE MAS NECESITAMOS SABER: Flawless Start Instant Perfecting Primer, es un primer de contextura, sedosa, ligera y universal que perfecciona instantáneamente el aspecto de la piel. Creando el lienzo perfecto para mejorar el aspecto y el uso de su maquillaje, el primer de perfeccionamiento instantáneo Flawless Start suaviza la textura irregular y disminuye la apariencia de poros, líneas finas y arrugas, mientras imparte a la piel un brillo hidratado y radiante.
Flawless Start Instant Perfecting Primer es libre de aceite y no comedogénico; El producto se mezcla suavemente con la piel y está diseñado para todo tipo de piel y tonos. Con un complejo de triple desenfoque con tecnología que difunde la luz, inmediatamente difumina las líneas finas y los poros e iguala el aspecto de la piel, para crear un fondo perfecto para la aplicación de maquillaje. La fórmula incluye un equilibrio preciso de emolientes y aceites especiales que mejoran la longevidad y el rendimiento de la base para mantener el maquillaje tan fresco todo el día.
Además de crear una apariencia retocada y uniforme, Flawless Start Instant Perfecting Primer proporciona impresionantes beneficios para el cuidado de la piel. Incluye tecnología de equilibrio de la piel de liberación prolongada que ayuda a controlar el brillo y mantener la humedad, mientras que las cuentas de sílice huecas absorben el aceite para una tez sin brillo.
COMO USARLO: Aplique una capa delgada de primer de manera uniforme sobre su cara y debajo de la línea de la mandíbula. El efecto será instantáneo ya que su piel se verá más suave, sus poros más pequeños y sus líneas finas menos visibles. Permita que la imprimación se establezca durante 10 segundos. Aplica tu base como normalmente lo harías.
INGREDIENTES: Triple Blurring Complex, Time Release Skin Balancing Technology, Longwear Polymers
ACERCA DE LA MARCA: Elizabeth Arden es una de esas firmas legendarias que desprenden algo más que cosmética y perfumes cuando es nombrada. Puede que sea por la idea de sus salones de belleza, con esas puertas rojas que todas queremos atravesar, o porque la mujer que representa desprende elegancia.
Florence Nightingale Graham, el nombre de Miss Arden, llegó desde Canadá a Nueva York en 1908. Tras un par de años aprendiendo el trabajo en un centro de belleza, adoptó el nombre comercial que conocemos hoy en día inspirándose en el título de un poema de Tennyson, Enoch Arden.